martes, 10 de febrero de 2009

LA OPCIÓN DEL BEATO JOSÉ ALLAMANO POR LOS AFRODESCENDIENTES.

Al estilo de nuestro hermano P. Ezzio Roatino imc, quien es conocido por su visión profética ante los acontecimientos históricos, me hice la pregunta en estos días sobre la incidencia de los Misioneros de la Consolata en el mundo de los afrodescendientes, al menos en nuestra región. Este razonamiento de un joven africano en las tierras latinoamericanas y envuelto en el mundo de los afrodescendientes me llevaba al atrevimiento de preguntarme ¿Qué haría el Beato José Allamano hoy si estuviera en Cali, María la baja, Bogotá, Pasacaballos o en Boca chica donde los descendientes de los africanos se encuentran bajo el cuidado de los hijos y las hijas de la Consolata?

El nacimiento del Beato José Allamano el 21/ 01/ 1851 coincide con un hecho histórico para el pueblo afrocolombiano quienes desde este mismo año inician un nuevo capítulo de su vida en diáspora. Se trata del día 21/ 05/ 1851 cuando el Presidente José Hilario López decretó la libertad definitiva de los esclavos en Colombia, continuando la tesis abolicionista de su antecesor José Félix de Restrepo, quien en 1812 decretó la libertad de vientres. Como agente de la pastoral afro, sería de mal gusto no aprovechar de esta coincidencia de acontecimientos para hacer una reflexión que de pronto cobraría su sentido en el aquí y el ahora de nuestro presente histórico.
Nace un misionero y con él nace el camino a la libertad para este pueblo tan particular. 158 años después de estos dos amaneceres, ni el carisma misionero de Allamano se ha apagado y tampoco se ha llegado a la supuesta libertad plena de los afrocolombianos decretada en el mismo año de su nacimiento. Mientras que el carisma de los Misioneros de la Consolata prende en Italia y la llama se extiende hacía el África para después encontrar su camino hacia

Ámerica latina, el grito de los pueblos afrocolombianos extiende su mano en busca de un carisma con conciencia afro que les conduzca a la libertad plena-la consolación. De hecho, este es el pueblo que acoge a los primeros Misioneros de la Consolata en Colombia desde el puerto de Buenaventura el día 12 de diciembre del año 1947 “Fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe- la Virgen Morena.”¿Qué dicha la nuestra, haber tenido al África como primera morada de nuestro carisma? Al tener África como su primer amor, nuestro carisma adquiere la conciencia afro- una sensibilidad misionera ante el mundo de las comunidades negras. Así pues, al estrenarse nuestro carisma en los países africanos, el espíritu de nuestro Instituto se enriquece y adquiere una conciencia muy particular ante el pluralismo cultural que le ha permitido descubrir entre los afros un desafío misionero y un llamado fuerte a evangelizar desde las culturas.

Gracias a la nueva lectura de “Misión Ad Gentes” que los Misioneros de la Consolata llegan a considerar la situación precaria de los afroamericanos como un campo de misión. Una verdadera “Misión Ad gentes” entre una población minorizada étnica y humanamente a lo largo de la historia. Es a este nuevo aerópago tan particular que estamos invitados a cumplir el sueño del beato José Allamano quién hizo la opción por el África, no como un lugar geográfico sino por la situación precaria de los africanos que se asemeja mucho a la de los africanos esclavizados en las Américas.

Cuando él hablaba sobre la evangelización de los pueblos, Allamano enfatizaba mucho sobre la necesidad de que los misioneros tuvieran un interés especial por las culturas. Es indudable la grandeza de su corazón ante el conocimiento de las otras culturas y sobre todo por las exigencias que les hacía a los misioneros que se encontraban en el continente africano. Por ende, los misioneros tenían que penetrar y comprender el ethos cultural de cada pueblo con una actitud del respeto para realizar la misión. De manera particular, el P. José Allamano concebía el lenguaje como un canal indispensable para el conocimiento de la cultura y desde ella mejorar la comprensión de la misma como un desafío misionero.

Esta invitación sigue muy vigente en el día de hoy para los que trabajamos con el pueblo afro. Mientras que nuestros misioneros en el África tenían que aprender la lengua kikuyu, kimeru, kiembu, kiluo etc., el fenómeno afro en las Américas pide un aprendizaje más complejo todavía.
Estamos ante una situación donde la persona del afrodescendiente es un sujeto social y político producto de un sistema homogenizante pensado por y desde el blanco, varón, letrado, de habla Inglés, francés, alemán o castellano etc. Es decir, un sistema discriminatorio por naturaleza. Por esta misma causa, Aparecida nos advierte que hoy, los pueblos afros están amenazados en su existencia física, cultural y espiritual; en sus modos de vida; en sus identidades; en su diversidad; en sus territorios y proyectos… Sufren graves ataques a su identidad y supervivencia, pues la globalización económica y cultural pone en peligro su propia existencia como pueblos diferentes convirtiendo la opción por este pueblo en un verdadero desafío para la obra evangelizadora de la Iglesia. (A 91). ¿Qué otra realidad necesitada de consolación que ésta? El llamado de Allamano de conocer las culturas pasa a otro nivel en este caso. No se trata solamente de empaparnos de las culturas de los afrodescendientes sino también entrar en su mundo, el cual la globalización económica y las políticas públicas de nuestros tiempos les ha asignado.

¿Cuál es el lenguaje de los afrodescendientes? ¿Cómo nos hablan y cómo quieren que les hablemos? No podemos limitar nuestros discursos a la mirada capitalista del consumismo que reduce el lenguaje del afro en la sonrisa, el baile, la música, el deporte y el arte en general. Si contáramos apenas con estas manifestaciones folclóricas culturales, tendríamos que apagar las luces e irnos, porque seríamos nosotros que nos estaríamos consolando en lugar de llevar la verdadera consolación. En el caso de la ciudad de Cali, una vida en casa de madera y de barro y el acompañamiento de lámparas hechas de tarros de aluminio con una mecha de trapo para alumbrar noches oscuras y largas nos tiene mucho que decir sobre la situación en la cual se encuentra nuestra gente.

Así pues, para llegar a captar este lenguaje, necesitamos ahondar nuestro compromiso con la situación vital- afro. Eso implica incluso bajar de las tarimas del folklor e ir a las periferias donde los sistemas políticos y económicos han destinado a estos hermanos nuestros. Hay una voz más allá del tambor y de la marimba que nos invita a llevar la consolación verdadera entre las comunidades negras de Colombia. En el caso de Cali por ejemplo, es esta voz que tendríamos que descifrar de tantos niños afros en los semáforos, de tantas mujeres en las plazas sentadas en cada esquina guardando su esperanza en la venta de unos chontaduros, de la cadena de ciclas por la mañana y al atardecer que inundan la avenida ciudad de Cali de nuestra ciudad por la cual se sale y se viene de trabajar por los pobladores del distrito de Aguablanca etc. La magnitud de esta realidad convierte el campo afro en un terreno aún virgen y donde tendríamos que agacharnos más para que estos pueblos puedan alcanzar un mínimo de consolación en sus luchas de cada día.
Cuando pensamos de lo que implica tener al continente africano como el más pobre del mundo, Haití como el país más pobre de América Latina, chocó como el departamento más pobre de Colombia y el distrito de Aguablanca como el sector más pobre de la ciudad de Cali, tendríamos que hacernos la pregunta ¿Cuál es la relación poder-saber- y color? Es apenas un ejemplo que de pronto nos movería a pensar lo grande que es este compromiso con el cual nos identificamos y por el cual hoy nos llaman Misioneros de la Iglesia Católica- Misioneros de la Consolata.

Nos animemos mutuamente entonces desde nuestra pequeñez a llevar adelante esta tarea tan particular que Dios nos ha confiado con fe y esperanza que un día las comunidades negras encontrarán la consolación verdadera. El Beato José Allamano nos recuerda que en las obras se requiere estabilidad. Vale más hacer un pequeño bien y continuarlo, que comenzar muchas obras grandiosas y dejarlas a medio camino (La Vida Espiritual del P. José Allamano. P. 493).


Diácono Venanzio Mwangi Munyiri, imc.
Pastoral Afro Cali.
03/ 02/ 2009

jueves, 11 de septiembre de 2008

PASTORAL AFRO- CALI.


HACIA UNA PASTORAL DE LACULTURA AFRODESCENDIENTE

EN LA ARQUIDIÓCESIS DE CALI.

El siguiente trabajo es un intento de recuperar la memoria y sistematización de una parte de lo que ha sido la pretensión de la pastoral afro en la diócesis de Cali sobre todo desde la llegada de los Misioneros de la Consolata en la diócesis de Cali en el año 2001.

Los datos aquí recopilados son muy valiosos pero lastimosamente no se ha podido ubicar exactamente las fuentes con nombres de sus autores. Se han recogido algunos elementos los documentos de la Iglesia, carpetas antiguas y hojas sueltas que al estudiarse apunta de una manera muy precisa a lo que debe entenderse por la Pastoral Afro y su posible camino dentro de la Iglesia colombina y particularmente en la Arquidiócesis de Cali.

El siguiente documento tiene como motivo la señalización de unos datos que consideraría básicos desde dónde se puede entender la Pastoral afro. De manera particular se presentan los siguientes temas: El marco teórico de la pastoral de las culturas, ¿por qué una pastoral de las culturas?, prioridades de la pastoral de las culturas, ¿por qué una pastoral de la cultura afrodescendiente?, ¿precisamente qué es la pastoral afro?, la complejidad de la dicha pastoral, ¿cómo es la situación en Cali?, ¿cómo realizar una pastoral afro en la arquidiócesis de Cali? ¿Cuál es el camino recorrido hasta la actualidad? ¿Con qué proyecto se ha trabajado y cómo se evalúa este proyecto? Finalmente se propone una guía para un camino posible para el año 2008 en adelante y junto a ella unas recomendaciones generales. Ojala que este mensaje pueda difundirse entre los mismos destinatarios (afro- descendientes) y al mismo tiempo convertirse tras modificaciones en manual de trabajo para nosotros que pretendemos animar esta pastoral.

Quisiera reconocer que la última parte sobre el camino ya recorrido y las evaluaciones hacías finales del año 2007 se atribuyen al padre Peter Kariuki I.M.C y el grupo de animadores de esta pastoral.

Datos recopilados y comentados, por Munyiri Venanzio Mwangi (15/ 01/ 2008).




...QUE VIVA LA CULTURA...

MARCO TEÓRICO

La pastoral es la acción concreta de transmitir la persona misma de Jesucristo y su palabra de salvación para construir la comunión entre Dios y la humanidad. Dice el Papa Benedicto XVI que “La historia de amor entre Dios y el hombre consiste precisamente en que esta comunión de voluntad crece en la comunión del pensamiento y del sentimiento de modo que nuestro querer y la voluntad de Dios coinciden cada vez más: la voluntad de Dios ya no es algo extraño que los mandamientos me imponen desde fuera, sino que es mi propia voluntad, habiendo experimentado que Dios está más dentro de mí que lo más intimo mío”1.

Para que la pastoral pueda llevar el evangelio al pensamiento y sentimiento del hombre, hay necesidad de acercarse a cada persona desde su entorno cultural, social, económico y político. “El evangelio de Cristo le llega a cada persona en su propia cultura, que impregna su manera de vivir la fe y que a su vez es moderada por ésta”2. La cultura es como la bandeja donde cada persona recibe a Jesucristo y su mensaje de salvación.

La cultura: Expresa los modos de ser y estar en el mundo. “Es esta manera particular en la cual los hombres y los pueblos cultivan su relación con la naturaleza, con sus hermanos, consigo mismo y con la divinidad en búsqueda de una existencia mejor”3. Abarca toda la actividad del hombre, su inteligencia, su afectividad, su búsqueda de sentido, sus costumbres, sus recursos éticos y la búsqueda de Dios.

La cultura representa todas las formas de hacer y sentir de un grupo social, el conjunto de prácticas, creencias, mitos y cosmovisiones del ser humano en relación con su entorno y con la solución de sus problemas cotidianos. La cultura, a pesar de ser transmitida por las generaciones anteriores, no es repetitiva sino que se transforma, se ayuda al desarrollar tecnologías, se resiste a la desaparición y se alimenta de los cambios en el contexto. Tiene particularidades en cada uno de los grupos pero permite relacionarse y coexistir, hace que la diferencia enriquezca su experiencia.

El reconocimiento de esas diferencias deberá permitir la integración antes que la segregación y la discriminación. “El corazón de cada cultura esta constituido por su acercamiento al más grande de los misterios: el misterio de Dios”4. He aquí lo que está en juego en una pastoral de la cultura: “una fe que no se convierte en cultura es una fe no acogida en plenitud, no pensada en su totalidad, no vivida con fidelidad”5. Esta pastoral se debe construir sobre valores y luchar enérgicamente sobre contravalores presentes en cada cultura. La toma de conciencia de la dimensión cultural de la existencia humana nos invita a una atención particular hacia este campo nuevo de la pastoral.

¿POR QUÉ UNA PASTORAL DE LA CULTURA?

La Iglesia ha vivido el proceso de encuentro y confrontación con las culturas desde los comienzos de la predicación del evangelio6. El primer concilio de la Iglesia en Jerusalén7 fue convocado precisamente para tratar el asunto cultural. La pregunta fue si uno tenía que asumir la cultura judía primero para ser un seguidor de Jesucristo. La respuesta fue “no” porque era evidente que el Resucitado se manifestaba a todas las personas, judías o no judías. Pastoral cultural es un campo que quiere integrar, traer a flote la riqueza de una cultura al servicio del evangelio. La pastoral de la cultura se aplica a las situaciones concretas.

PRIORIDADES DE LA PASTORAL DE LA CULTURA

El Consejo Pontificio de la Cultura nos propone unas prioridades de pastoral de la cultura y aquí añadimos también otras de nuestro entorno.

Religiosidad popular. Expone muchos elementos culturales. La pastoral de la cultura propone un estudio profundo de los elementos de la religiosidad popular para crear una fuerza para evangelizar esta realidad diaria.

La parroquia. Para llevar al corazón de los hombres el anuncio del evangelio, se necesita conocer y vivir la experiencia de la cultura parroquial y su entorno.

Instituciones de educación. La pastoral de la cultura se apoya sobre la educación y toma como punto de anclaje la familia.

Centros de formación teológicos. Una adecuada formación teológica es el mejor medio para afrontar las amenazas (como fundamentalismo o subjetivismo) de la auténtica piedad popular y la cultura de nuestro tiempo.

Medios de comunicación social e información religiosa. Las emisoras católicas de televisión y sobre todo de radio, aun siendo modestas, desempeñan un papel no despreciable de evangelización de la cultura e inculturacion de la fe.

Ciencia, tecnología, bioética y ecología. La Iglesia debe estar atenta a las contribuciones, los nuevos interrogantes y desafíos suscitados por la ciencia, la tecnología y las nuevas realidades que ellas crean.

El arte y los artistas. En una cultura marcada por un torrente de imágenes, frecuentemente banales, brutales y diariamente arrojadas por las televisiones y video producciones, una alianza fecunda entre el evangelio y el arte suscitará nuevas epifanías de la belleza nacidas de la contemplación de Cristo.

Patrimonio cultural, turismo religioso. Pastoral de los edificios religiosos más frecuentados hace que los visitantes se beneficien del mensaje del aquellos son portadores.

Las minorías étnicas. Por siglos, muchos pequeños grupos étnicos han vivido defendiendo y conservando sus valores culturales, a veces inconscientemente. Ni la esclavitud, violencia, desplazamiento, racismo, marginación o globalización han sido capaces de acabar con sus modos de ser y estar en este mundo construidos en el transcurso de los siglos. La pastoral de la cultura representa una herramienta interesante para evangelizar estos grupos. El análisis de estas prioridades nos confirma que la dimensión cultural es algo que cada evangelizador debe tener en el corazón.

¿Qué es un grupo étnico?

Un grupo étnico es aquel que se diferencia en el conjunto de la sociedad nacional o hegemónica por sus prácticas socioculturales, las cuales pueden ser visibles a través de sus costumbres y tradiciones.

Estas últimas le permiten construir un sentido de pertinencia con comunidad de origen, pero tal auto-reconocimiento, no es un obstáculo para que sean y se identifiquen como colombianos. De este modo, comparten dos sentidos: uno étnico y otro nacional.

Los grupos étnicos en Colombia están conformados por los pueblos indígenas, los afrocolombianos o afrodescendientes, los raizales y los rom.

¿POR QUÉ UNA PASTORAL DE LA CULTURA AFRODESCENDIENTE?

La pastoral de la cultura afro es importante precisamente por lo que dice el Papa Juan Pablo II que la fe debe convertirse en la cultura. Mucha gente está de acuerdo que la fe cristiana aún no logra llegar al corazón de la cultura afrocolombiana. Esto es un desafió para muchas personas y particularmente los sacerdotes. Unos dicen “¿por qué quieren dividir la gente con eso de la pastoral de la cultura afro? Todos los seres humanos somos iguales”. Esto es una equivocación grande. Los seres humanos tienen los mismos derechos pero cada uno y cada grupo es único. Reconocer estas diferencias y aceptarlas crea fuente de mucha riqueza en la convivencia. Más que acoger a los afros en el seno de la Iglesia, la pastoral pretende identificar los valores de esta cultura y entregarlos a la Iglesia universal.

¿PRECISAMENTE QUÉ ES LA PASTORAL AFRO?

Es una acción evangelizadora desde la cultura de los afrodescendientes, para acompañar el encuentro de todos los hombres y mujeres con Jesucristo vivo, presente por la acción del Espíritu Santo en la Iglesia que se congrega para alimentarse con la palabra y los sacramentos y quien se manifiesta a todos los pueblos.

La pastoral afro no es una ONG. Como los otros grupos de la Iglesia es responsable de su acción caritativa. El Papa Benedicto XVI dice que “La Iglesia como familia de Dios, debe ser, hoy como ayer, un lugar de ayuda recíproca y, al mismo tiempo, de disponibilidad para servir también a cuantos fuera de ella necesitan ayuda”8. La obra caritativa nos ayuda a caminar hacia nuestra meta que es comunión con Dios.

La pastoral afro no es y no puede ser un movimiento político. Existen muchos grupos de negritudes en muchas partes y la pastoral afro no es uno de ellos. La pastoral afro tiene responsabilidad hacia estos grupos que luchan por una cosa u otra para el pueblo afro. El Papa Benedicto XVI dice en su primera carta encíclica “Tratándose de un quehacer político, esto no puede ser un cometido inmediato de la Iglesia. Pero como al mismo tiempo es una tarea humana primaria, la Iglesia tiene el deber de ofrecer, mediante la purificación de la razón y la formación ética, su contribución especifica, para que las exigencias de la justicia sean comprensibles y políticamente realizables”9.

El corazón de la pastoral afro debe estar en:

  • La palabra de Dios estudiada y meditada desde la perspectiva afro,
  • La Eucaristía con expresiones afro,
  • La buena organización de las actividades y
  • Una vida fraterna ejemplar que llame la atención a los demás.

La pastoral afro no es una secta de los negros en la Iglesia católica. Es una acción evangelizadora para toda la iglesia desde la cultura afro. Necesitamos recordar dos incidentes curiosos que se presentaron en el sínodo africano. Los obispos del continente no se pusieron de acuerdo en dónde hacer el sínodo y el Papa los llamó a Roma. El padre comboniano Kizito Sessana escribió que Roma había secuestrado el sínodo africano y muchos le cayeron encima. Segundo, la Iglesia africana hizo miles de propuestas pero al fin del día el Papa sacó un pequeño documento: El sínodo africano para la iglesia. Con él, apareció una visión de la Iglesia que no se manejaba con seriedad antes; la Iglesia como una familia de Dios. La pastoral afro debe tener una visión universal. La Madre Iglesia está esperando ansiosamente su contribución.

LA COMPLEJIDAD DE LA CULTURA AFRO.

La cultura de los afrodescendientes tiene una trayectoria de formación muy larga y compleja. Debe su forma a la vida de las tribus que vivían en el continente africano hace muchos años antes de la división colonial en 56 países hoy día. Estas tribus tenían contactos con los europeos, los asiáticos y otros reinos del mundo. Entre ellos se hacían negocios, intercambio de las ideas políticas, religiosas y cultivos y así un intercambio de los elementos culturales.

Esta cultura recibió otros elementos cuando los africanos fueron arrancados de sus tribus y vendidos a otros continentes como esclavos. Su captura, transporte, venta y trabajo inhumano trajeron otros componentes culturales que no existían ni existen en el continente. Su situación tampoco borró todos los elementos traídos del continente natal pero no podemos negar que los afrodescendientes perdieron buen porcentaje del orgullo de su raza.

La abolición de la esclavitud trajo también otros elementos a esta cultura. Después de siglos de esclavitud, nadie capacitó a la persona afro para defenderse en la vida socio-política y económica. La esclavitud siguió muchos años después con otras formas. Hoy en día la persona afro sigue luchando contra marginación, racismo, pobre liderazgo, pobreza, violencia, etcétera. Existe un grupo de personas afro muy bien preparadas pero en Colombia todavía no hemos visto un carácter carismático para alzar la bandera y que sigan los hijos a la libertad. ¿Quien cogerá el animal por los cuernos para que los demás puedan aguantar las patadas y definitivamente domar el enemigo? ¿Será que la persona afrocolombiana puede aguantar las patadas o todavía se siente bien bajo el patrón? Sólo el tiempo dirá.

Mientras existen muchas diferencias entre varios grupos de afrodescendientes, no se puede negar que comparten una cultura definida. Como hemos visto, la cultura es importante para el hombre porque abarca toda su vida. La dimensión cultural es el camino más adecuado para llevar a Jesucristo en el corazón de la persona afro. La verdad dicha, la persona afro no es prisionero de su cultura. “No se puede negar que el hombre existe en una cultura concreta, pero tampoco se puede negar que el hombre no se agota en esta misma cultura. …en el hombre existe algo que lo trasciende… para que no sea prisionero de ninguna de las culturas, sino que defienda su dignidad personal viviendo de acuerdo con la verdad profunda de su ser”10.

LA SITUACIÓN EN CALI.”

EL MARCO DE LA REALIDAD.

La santiago de Cali es una de las ciudades más grandes de Colombia con más de 2.600.000 habitantes. Se funda el 3 de julio de 1536 y sólo hasta 1910 se crea la diócesis de Cali, separándola de la diócesis de Popayán. En 1964 es elevada a la categoría de Arquidiócesis, por el papa Pablo VI. Ha tenido varios obispos, desde la creación, han estado; Monseñor Alberto Uribe Urdaneta (1960- 1985); Monseñor Pedro pubiano Sáenz (1985- 1995); Moseñor Isaías Duarte Cancino (1995- 2002); Monseñor Juan Francisco Sagasti Jaramillo (2002 a la actualidad).

La mayor parte de la población afro en Cali viven en el distrito de Agua blanca. La arquidiócesis de Cali no es sólo la zona urbana y por eso la proyección pastoral comprende también el territorio rural como Robles, hormiguero, pueblos que en su mayoría son asentamientos de afrodescendientes.

Por mucho tiempo mucha gente de buena voluntad ha venido trabajando incasablemente para sacar adelante el pueblo afrocaleño. La iglesia católica no ha sido indiferente ante esta tarea tan noble. Ella ve con suma preocupación la realidad que viven los afrodescendientes y quiere acompañar desde la persona de Jesucristo y la cultura los procesos que pretenden promocionar la vida de este pueblo.

La pastoral entre los afrodescendientes existe desde que existieron los afrodescendientes en Cali. Como una iniciativa de la Iglesia local, la pastoral afro nace como respuesta a las inquietudes de las hermanas del Santo Ángel que trabajan en el corregimiento de Robles. Ellas trabajando entre los afrodescendientes del lugar sintieron la necesidad de una pastoral especializada que podría responder a las necesidades de dicho específico pueblo. A Monseñor Isaías le sonó la idea y consideró una necesidad la pastoral de las negritudes en la diócesis de Cali.

Con el padre William Riascos, franciscano, que trabajaba en la parroquia Cristo Señor de la vida en Marroquin II, se inició una nueva etapa. Desde su parroquia impulsó bastante la idea de una pastoral conciente a la cultura afro. concretamente organizó un grupo afro en marroquin II y otro en mojica II. Éste último se convirtió en fundación AFRO MOJICA.

Con el traslado del padre Riascos, se nombra el P. William Palomeque, un sacerdote diocesano, que desde la parroquia Jesús de los milagros (el retiro), en colaboración con el padre Alfredo Walter asumieron el proceso por un corto tiempo. El padre Palomeque organizó un equipo de trabajo con la mayoría de la gente de su parroquia. Se dedicó más en la formación de las mujeres madres solteras que trabajan en la fundación del P. Alfredo.

Es importante notar que Marroquin, Mojica y el Retiro son barrios que tienen una gran concetración de la población negra. Por otro lado no se puede desconocer el trabajo de las hermanas del Santo Angel de Robles que trabajaron entre los afrodescendientes durante muchos años. Es sabido que desde ellas viene la propuesta de una pastoral afro. Ellas habían sentido la necesidad de evangelizar desde la cultura.Luego vinieron los misioneros de la Consolata para retomar el trabajo desde la Parroquia el Santo Evangelio.

“PREGUNTAS CLAVES Y POSIBLE RESPUESTAS.”

¿Qué se hace para organizar la pastoral con afrodescendientes en la arquidiócesis de Cali?

  • Formular un programa integral de pastoral con afrodescendientes.
  • Aplicar el programa y evaluar periódicamente
  • Capacitar adecuadamente a los agentes laicos que colaboren en esta pastoral.
  • Realizar y difundir estudios e investigaciones sobre diversos tópicos de esta realidad

¿Cómo lograr que las zonas y las parroquias que tienen afrodescendientes integren en su trabajo las orientaciones de esta pastoral de la arquidiócesis?

  • Elaborar y difundir subsidios que apoyen el trabajo de las parroquias en este campo.
  • Propiciar una reflexión sobre este tema en una de las asambleas de los sacerdotes.
  • Realizar encuentros periódicos con sacerdotes, religiosas y laicos que trabajan en esta pastoral.
  • Leer y dialogar sobre el programa de la pastoral afro con los párrocos que tienen alto número de población afro.

¿Cómo comunicar las inquietudes sobre la pastoral con afrodescendientes a toda la arquidiócesis?

  • Elaborar ayudas y materiales para promocionar esta pastoral (página web. volantes, afiches, plegables, semana de las negritudes en marzo, mayo o agosto).
  • Realizar foros que profundicen sobre la realidad de los afro descendientes en la arquidiócesis.

¿Como encarnar la liturgia en la cultura afro caleña?

  • Realizar estudios de investigación desde la liturgia de la Iglesia y desde la cultura afro caleña.
  • Experimentar algunas formas de inculturacion (conformar grupos musicales con sentido litúrgico, etc.)

“EL CAMINO HECHO POR LOS ANIMADORES HASTA LA ACTUALIDAD.”

ÚLTIMO PLAN DE TRABAJO EXPERIMENTADO.

SE PROPONE COMO OBJETIVO GENERAL

Acompañar desde la cultura de los afrodescendientes, el encuentro de todos los hombres y mujeres con Jesucristo vivo, presente por la acción del Espíritu Santo en la Iglesia que se congrega para alimentarse con la palabra y los sacramentos y quien también encontramos en cada pueblo.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS.

Animar a los agentes de pastoral afrodescendientes para vivir auténticamente nuestra condición de hijos e hijas de Dios, tal como lo hizo Jesús (Evangelización kerygmática).

Actividades:

  • Buscar y motivar los agentes de pastoral afro. En septiembre de 2006 tener ya un grupo pastoral organizado con miembros responsables y comprometidos.

  • Exponer lo que es pastoral afro. En septiembre de 2006 tener el primer número del folleto para difundir qué es pastoral afro, nuestras actividades en la arquidiócesis y otras partes.

  • Preparar y celebrar las eucaristías con expresiones afro. Cada 15 días animar una Eucaristía en parroquias o sectores escogidos (Los lagos, Mojica, Retiro y Marroquín en la 2a y 4a semana del mes).

  • Hacer una lectura bíblica desde lo afro. Cada mes hacer una lectura bíblica en hora y sitio donde podamos tener ambiente de oración.

Promover la comunión con la Iglesia local de Cali (Concientización).

Actividades:

  • Tener contactos con todos los obispos de Cali. Antes del fin del año 2006, invitarlos al grupo, en diferentes momentos, para compartir con ellos sobre esta pastoral cultural, la lucha y escuchar sus propuestas.

  • Invitar sacerdotes, religiosas y laicos para compartir con nosotros sobre temas de interés. Escoger temas que queremos profundizar e identificar sacerdotes, hermanas o laicos de arquidiócesis de Cali con competencia para exponer el tema.
  • Conocer y discutir el Plan Pastoral de la Arquidiócesis de Cali. Cada miembro debe conseguir una copia del plan, leerlo y socializar el contenido en una reunión.

Promover Liderazgo en los servicios pastorales (Promoción Humana).

Actividades:

Atención a los jóvenes. Antes del fin del año 2006, conformar un grupo Juvenil afro.

Responsables de la música y animación de grupo. Antes de septiembre de 2006 preparar el folleto de cantos y la parte instrumental.

Crear un espíritu evangelizador y misionero (Evangelización kerygmática).

Actividades:

  • Organizar misiones cortas. En diciembre de 2006, animar la novena de navidad en varios sectores donde haya mayoría afro.

  • Conocer bien la Santa Biblia. Hacer un curso bíblico para ayudar en la Inculturacion de la palabra de Dios en el ambiente afro.

Una formación cultural profunda (Inculturación).

Actividades:

  • Programar todo lo que se debe aprender sobre la cultura afro. Hacer la lista de los temas culturales que necesitamos profundizar. Priorizar y programar los que vamos a tratar entre junio y diciembre de 2006.

  • Identificar y socializar los valores de la cultura afro. Antes del fin del año, invitar a la Hermana Ayda Orobio para compartir y animar este tema.

Vivir la solidaridad con los demás (Promoción Humana).

Actividades:

  • Organización comunitaria y economía solidaria. En el mes de octubre 2006, identificar unas organizaciones del trabajo comunitario para conocer sus experiencias y fundar nuestro grupo para servir a la comunidad.

  • Promoción de los derechos humanos. En el mes de octubre, realizar un taller sobre los derechos humanos y escoger las actividades.

Maria, nuestra madre y modelo (Evangelización kerygmática).

Entender quién es:

Madre que nos forma como auténticos hijos e hijas.

Modelo de discípulo fiel hasta la cruz.

Creyente que vive la experiencia de la pascua y la anuncia con entusiasmo misionero.

Actividades:

  • Desde el mes de Junio, crear espacios de reflexión para acercarnos a la persona y a la vida de Maria para que la familia afrodescendiente aprenda de ella.

EVALUACIÓN DEL CAMINO PREVIAMENTE PROPUESTO AL FINALIZAR EL AÑO 2007.

PRIMER OBJETIVO

El primer objetivo insiste en animar a los agentes de pastoral afro descendiente. Para realizar este, hemos fortalecido el grupo de la liturgia. Este grupo prepara y anima las eucaristías con expresiones de la cultura afro como la música alegre con sus instrumentos musicales, los símbolos, vestidos, bailes y la participación viva de los afro descendientes. En junio, julio y agosto, hemos cebrado en las parroquias de San Luis Beltrán en Los Lagos dos veces, El Retiro, Mojica, Cristo Maestro, Santo evangelio con matrimonio afro en marroquín. Hemos visto mucho entusiasmo no solamente entre los afro descendientes sino también entre los mestizos y los indios. Eso nos anima mucho porque la idea de pastoral afro es incultural los valores afro en la Iglesia para que ellos puedan sentirse en la casa y los demás puedan enriquecer su vida espiritual fortaleciendo la fraternidad.

El segundo elemento que esta en marcha en este esfuerzo de animar a los agentes es conformación de los grupos de la pastoral afro en las parroquias. Hasta el momento tenemos tres en las parroquias de Santo Evangelio, Marroquín, y Cristo Maestro. La parroquia de los Lagos tiene una población afro muy grande pero muy pocos de ellos van a esta parroquia. La parroquia de Retiro ya tiene un grupo bueno que comenzó el Padre Palomeque. Este proceso va a seguir en las otras parroquias con población afro. Por ahora los grupos se reúnen una vez cada semana. Se ve mucho entusiasmo hasta el momento y estamos buscando maneras de animarlos más para que se comprometan. Estamos planeando una misa para recibir los agentes en la pastoral afro en el mes de septiembre u octubre. Aquí son los pasos que seguimos para iniciar a las personas en la pastoral afro.

El grupo juvenil afro ya esta tomado forma con la presencia de varios jóvenes llenos de entusiasmo. En los días 5,6,7 de agosto ellos coordinaron el encuentro de los delegados juveniles al nivel nacional. Se reunieron en la casa de animación los Combonianos. Por ahora no queremos separar el grupo de los jóvenes de los adultos.

Todos los miércoles el grupo coordinador se reúne en la curia alterna Barrio la Unión a las cinco de la tarde y la actividad ha sido muy provechosa para la organización de la pastoral.

SEGUNDO OBJETIVO.

Segundo objetivo es promover la comunión con la iglesia local de Cali. Vamos a seguir enviando los informes de cómo pastoral afro va desarrollando en la arquidiócesis a todos los Obispos. Cuando el tiempo es oportuno, vamos a invitarlos para compartir con el grupo. En estos meses, hemos idos estableciendo amistad con varios párrocos y religiosas. Queremos también que plan pastoral de la arquidiócesis de Cali acomode una idea clara de pastoral afro.

TERCER OBJETIVO.

Tercer objetivo es promover liderazgo. Lo que se ha hecho hasta el momento es acoger y animar a los jóvenes afro. En los días 5,6,7 de agosto se hizo un encuentro de los delegados juveniles de diferentes partes del país. Los jóvenes del Cali organizaron el evento muy bien pidiendo la ayuda donde era necesario y pronto vamos a tener un grupo juvenil afro organizado. Hemos comenzado la campaña de aprender a tocar a los instrumentos y de hacer el folleto de los cantos.

CUARTO OBJETIVO.

Este es crear un espíritu evangelizador y misionero. En nuestros encuentros insistimos mucho en la lectura bíblica y unos miembros esta haciendo un curso corto de la Biblia. Es impresionante como la gente quiere conocer la santa Biblia y relacionar las enseñanzas con la realidad.

QUINTO OBJETIVO.

Una formación cultural profunda. Primero sacamos los temas que queremos tratar y después conformamos grupos de investigación. Después vamos a socializar en el grupo base y hacer un documento. Hemos trabajando también el tema de la semana santa entre los afro descendientes y nos salió bien.

SEXTO OBJETIVO.

Vivir la solidaridad con los demás. En este punto lo que hay es una propuesta de conseguir un lugar en Marroquín para planear las actividades de la pastoral afro. Hacer un centro con espacio de dar varias capacitaciones como zapatería, culinaria, modistería, peluquería, escobas y trapeadores entre otras.

SÉPTIMO OBJETIVO.

María es nuestra Madre y modelo. Vamos reflexionando sobre la virgen y colocamos su imagen en las camisetas pastoral. Queremos que nos enseñe a ser discípulos fieles hasta la cruz.

“UNA GUIA PARA UN CAMINO POSIBLE EMPEZANDO EL AÑO 2008.”

FORMACIÓN DE GRUPOS PARA LA PASTORAL AFRO.

Para darle un cuerpo a la pastoral afro colombiana en la arquidiócesis de Cali, se propone fundar grupos pastorales en todas las parroquias con buena población de los afrodescendientes. La conformación de grupo tendrá varias etapas.

PRIMERA ETAPA:

Convocación y orientación de los nuevos miembros en la pastoral desde la cultura de los afrodescendientes. Insistimos en los siguientes pasos en esta etapa:

La historia de los afro-descendientes en Colombia. Este tiene la intención de ayudar a los nuevos miembros a entender quien es un afrodescendiente y porque hacemos pastoral afro.

Segundo paso será explicar qué es pastoral afro y los esfuerzos que se han hecho en Colombia y América latina para construir esta acción de evangelización desde lo afro.

Hacer un curso bíblico porque la palabra de Dios será el eje de esta pastoral.

Después de cumplir los tres requisitos anteriores se llevará acabo una misa afro para la ceremonia de RECIBIMIENTO en la pastoral afrodescendiente. El nuevo miembro recibirá la camiseta de la pastoral afro y comprometerse a evangelizar la buena noticia desde lo afro utilizando todos sus talentos.

SEGUNDA ETAPA:

Es un momento de profundización. Los nuevos miembros reciben el proyecto de la pastoral afro, estudian cada punto cuidadosamente y con la ayuda del sacerdote y los agentes proponen las actividades concretas en su parroquia. Se escoge uno(a) coordinador(a) para representar la parroquia en el grupo base que se reúne en la curia alterna.

Cada grupo debe ser muy atento a las actividades de la pastoral a nivel parroquial, arquidiócesis, nacional, y también internacional

Iremos observando el empeño de los nuevos miembros y cuando es propicio organizar la fiesta de consagrar los nuevos agentes de pastoral afro. Entregaremos un carné de agente de pastoral afro en la arquidiócesis de Cali.

Nuestro patrón será San Martín de Porres. Su fiesta es 3 de Noviembre.

RECOMENDACIONES:

1. Tener en cuenta que nuestra pastoral tiene dos referencias: Jesucristo y el Pueblo. Jesús es la referencia absoluta en todos los tiempos, lugares y circunstancias: sin Jesús y la comunidad concreta desde y por el cual se encarna la divinidad en el mundo no existe la pastoral.

2. Las comunidades negras oprimidas, explotadas, empobrecidas son el suelo fértil de donde nace la esperanza de un Dios libertador. Por todo lugar se escucha como un eco el clamor de este pueblo a hacer su pascua, saliendo de una situación de muerte hacia una situación de vida.

3. El pueblo negro hace una experiencia propia de Dios. El Dios de los oprimidos en nuestro medio asume nuestro rostro, nuestro color, nuestra cultura, nuestra forma de ser.

4. La expansión de esta experiencia de Dios vivo desde la pastoral afro nos pone en marcha para realizar el clamor del encuentro de nuestros obispos y todo el pueblo de Dios en América latina y en el caribe de vivir desde el espíritu del discipulado y misión.



1. Deus Caritas Est No. 17


2. Fides et ratio n. 71

3. Concejo Pontificio de la Cultura.

4.Juan Pablo II Discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas. Nueva York, 5 oct. 1995

5.Juan Pablo II, Carta autógrafa por la que se instituye el consejo Pontificio por la Cultura, 20 de mayo de 1982.

6.FIDES et ratio N. 70

7. Hechos 15

8. Deus Caritas Est. No. 32

9. Ibid, No. 28.

10. Veritatis Splendor N 53


viernes, 5 de septiembre de 2008

QUE BUENO ES INVITAR AL NIÑO QUE VIVE EN NOSOTROS EN LOS MOMENTOS MÁS IMPORTANTES DE NUESTRAS VIDAS. GRACIAS A ESTE NIÑO QUE LOGRAMOS SUPERAR MUCHAS DIFICULTADES.
Cuando el niño llega al mundo, no se le ocurre que el mundo pueda o deba ser distinto de lo que es. Se limita a abrir los ojos maravillado y fascinado ante lo que hay allí fuera y se abre camino en ese mundo lo mejor que puede.

Ese niño que lleva usted dentro sabe aceptar lo que no se puede cambiar, sin considerar que el mundo sea fundamentalmente malo por ello; sabe no dejarse inmovilizar intentando hacer lo que nadie puede hacer y hundirse luego en la inercia o en el pánico porque no se puede hacer. En suma sabe por instinto y de modo inmediato "establecer diferencia", y esa sabiduría no es , por tanto, algo nuevo que haya de aprender sino una sabiduría olvidada que sólo tiene que recordar recurriendo a ese niño perdido que hay dentro de usted.

ALTO! ESCÚCHAME!!

CUANDO TE PIDO QUE ME OIGAS Y EMPIEZA A DARME CONSEJOS, NO HA HECHO LO QUE YO TE PEDÍ. LA JUVENTUD PIDE QUE SE LE ESCUCHE. EN MEDIO DE TANTOS PREJUICIOS ANTE LA POSIBILIDAD DE TENR UNA JUVENTUD DE CONFIAR ES SUMAMENTE IMPORTANTE QUE APRENDAMOS A ESCUCHAR AL JOVEN. NUESTRO SILENCIO TIENE MUCHO QUE DECIRLE MÁS QUE NUESTRAS PALABRAS.

DECOLONICACIÓN, UN RETO PARA LA EDUCACIÓN SUPERIOR EN AMÉRICA LATINA.

DECOLONIZAIÓN

UN RETO PARA LA EDUCACIÓN SUPERIOR EN AMÉRICA LATINA.

Dicen los mayores que la etnoeducación tiene que servirnos para construir y fortalecer nuestras identidades culturales, y por ello hay que desprender lo ajeno para reapropiarnos de lo propio. Lo propio no es más que lo que nos constituye como pueblo diferenciado, como afroecuatorianos/as; dentro de lo propio están nuestras historias construidas desde las herencias africanas, historias que nos ayuden a ser lo que queremos ser, a reencontrarnos nosotros mismos. Por tanto, es necesario cambiar los espacios y las formas de enseñanza-aprendizaje, lo que implica, según los/las mayores, tener la voluntad y el compromiso con los ancestros.[1]

Para abordar el tema de la educación superior en América latina, es fundamental hacernos las siguientes preguntas; ¿qué entendemos por conocimiento y cómo lo estamos proponiendo dentro de las instituciones educativas? Si nos remetimos un poco a la historia, vemos que los discursos formales sobre el conocimiento y por tanto la ciencia empiezan a formalizarse desde el occidente y sobre todo desde el mundo griego con los distintos discursos filosóficos. Después, a través de las distintas influencias religiosas sobre todo el judaísmo, el cristianismo y el islamismo se fueron transmitiendo las distintas formas de conocimiento en forma de educación. De hecho desde el mundo griego, empezaron las famosas escuelas de pensamiento que recogían distintas líneas de interpretar la realidad humana y del cosmos.

Entre tantas formas de conocimiento que se inscriben en la historia, la ciencia tiende a dominar como la forma auténtica del conocimiento. De hecho entre los siglos XVIII y XIX la ciencia ocupa un lugar dominante y se le considera como el conocimiento legítimo. En latín, “scientie”-ciencia significa “conocer”. Sin embargo, el término en su sentido más amplio ha sido empleado para referirse al conocimiento sistematizado en cualquier campo, pero siempre con una inclinación fuerte a lo sensorial o lo objetivamente verificable. Pero si entendemos el conocimiento como la relación entre un sujeto y un objeto, es imposible limitarnos a lo que se puede verificar objetivamente. Debemos aceptar desde el inicio que existen varias formas de llegar al conocimiento.

Desde el occidente, los filósofos Sócrates, Platón y Aristóteles desarrollaron unos discursos acerca del conocimiento de la realidad que tuvieron mucha influencia tanto en su contexto inmediato como a su alrededor. Después, las doctrinas filosóficas cogieron mayor fuerza en lo religioso de tal manera que durante el emperio romano las doctrinas cristianas fueron transmitidas en forma de educación por toda Europa y más adelante en los otros continentes. A través de la religión, los musulmanes y los judíos intermediaron el pensamiento y la ciencia de la antigua Grecia y los estudios europeos. Después en el renacimiento, se extiende un gran interés por las culturas griegas y romanas. Hasta entonces, la educación como un espacio de promover conocimiento fue un privilegio para los ricos. No todos podían acceder a la educación. Desde ahí entran en juego los elementos del saber poder y el ser. Los que lograban entrar en las instituciones educativas se consideran más por encima de los demás. El vehículo para llegar a este rango era y sigue siendo el poder, sea religioso, económico o político.

Los tres componentes; ser, saber y poder dentro de la producción del conocimiento se convierten en referentes de mayor influencia en todo el proceso educativo. De hecho, si miramos en términos generales, la ciencia de la educación es pensada desde y a partir de paradigmas occidentales por la sencilla razón del monopolio que ellos tienen en cuanto al poder y al saber. De hecho, los principales modelos de universidades se presentan desde el siglo XVIII en Europa y después se han venido modificado a lo largo de la historia en los distintos contextos.

Entre los siglos XVIII y XIX, sobre salen unos tres modelos de universidades cuya influencia llegó hasta América latina. Ellos son el modelo inglés, con los Colleges autónomos y fuerte tradición de estudios humanistas. Este modelo de universidad favoreció a las elites especialmente para las actividades de sacerdocio religioso y para los que se dedicaban al servicio público. Con tiempo el modelo inglés incorporó la rama de las ciencias naturales. Después siguió el modelo alemán que también favoreció una tradición humanista y las ciencias. Por último surgió el modelo napoleónico francés que rechaza tanto las tradiciones humanistas y crea un nuevo sistema de formación técnica y profesional.

De los tres modelos, Estados Unidos importa el modelo inglés y le añade el elemento de investigación científica y tecnológica del modelo alemán. En fin, ese modelo es copiado en otras partes del mundo como un paradigma para las otras universidades fuera de Europa y los Estados Unidos. Este último paso le favorece mucho al sistema capitalista donde la ciencia llega a calificarse como la forma auténtica de conocer en cuanto generadora de soluciones prácticas a las necesidades humanas. Esta tendencia combinó muy bien con el avance tecnológico que era evidente desde muy temprano en Europa y América del norte. Eso quiere decir, los países de escasos recursos pasan a un segundo plano en cuanto a la producción del conocimiento por la supuesta razón de que no tienen los recursos adecuados o suficientes para producir conocimiento. Por eso, geopolíticamente, el resto del mundo se orienta hacia el occidente y el norte ya que resultan ser los lugares donde se encuentran las universidades más grandes del mundo y desde donde el resto de la humanidad tiene que formarse al estilo europeo o norte americano.

América latina desde la colonialización importó varias universidades católicos que hacían parte del emprendimiento colonial. Por consiguiente, la educación se convierte en una herramienta más de colonización. En las primeras décadas, los pocos que podían formarse desde estos espacios se disponían al servicio de los gobiernos de los grupos dominantes. Como consecuencia, tanto la concentración del poder, como del saber fue creando una diferencia enorme entre los que se iban formando desde el estilo europeo y los que no tuvieron esta posibilidad. En la medida que los latinoamericanos se iban formando al estilo europeo y asumiendo cargos públicos, los sistemas políticos, económicos y socio- religiosos de sus regiones fueron adoptando una dependencia que hoy por hoy es casi irreversible. Las instituciones de educación superior por ejemplo empezaron y siguen trabajando conceptos, ideas e instrumentos que hacen parte de la tradición intelectual occidental en búsqueda de aclarar temas de interés local.

Este tipo de orientación responde a la tendencia de la modernidad donde la globalización y la homogenización de los sistemas, políticos y económicos, se convierte en una forma clave para perpetuar el dominio del occidente y del norte sobre el resto del mundo. Eso no quiere decir que el occidente sea la fuente del conocimiento. La educación como tal está presente en la vida del hombre desde los comienzos de su existencia pero los procesos de colonización les han negado literalmente a muchos pueblos la posibilidad de desarrollar este aspecto desde su propia realidad. Cada ser humano es capaz de llegar al conocimiento por su naturaleza sin necesidad ninguna de importar criterios ajenos. El hecho de que esta forma de conocimiento no sea planeada, consciente y sistemática no le quita a ningún grupo humano la posibilidad de interpretar su realidad. La preocupación nuestra en este instante debería ser sobre la posibilidad de incorporar los componentes epistemológicos cosmológicos locales para la producción del conocimiento desde América latina.

Lastimosamente, el monopolio de los procesos de la producción del conocimiento no se limita solo a lo geográfico. Más allá del mapa aparecen otros criterios donde los procesos de conocimiento han sido clasificados desde lo racial y desde el género. Es evidente que todavía se considera como primitivo o inferior la sabiduría africana, indígena, latino americana etc. El racismo por ejemplo deja de considerarse como una categoría biológica y se aplica como un criterio de discriminación y de apoderamiento de los unos por encima de los otros. De igual manera, no podemos negar el hecho de que el machismo sigue dominando dentro de los procesos educativos y la producción del conocimiento. Nuestras universidades deben promover mayor participación de los afrodescendientes, de los indígenas, de las mujeres etc. para que se pueda hablar de un verdadero camino de liberación desde tondos los ámbitos que implique a academia. A lo contrario, desde que haya cualquier forma de discriminación, seguiremos perpetuando nuevas formas de colonializar a los demás. Debemos superar las tendencias de juzgar entre quién piensa y quién no desde las líneas etnias o desde el género. Estas tendencias promueven discursos y prácticas que en el fondo deshumanizan.

En la actualidad, vivimos una época de tensión creciente entre el norte/ occidente y el sur/oriente. Los procesos de la globalización y la homogenización de los sistemas van en contra de la tendencia del hombre y la mujer actual de los países “tercer mundistas” de realizarse desde su realidad. Se respira desde otras partes del mundo un fuerte rechazo hacia América del norte y Europa por su papel histórico que aparentemente después de la colonización sigue influyendo de manera negativa los procesos del progreso sobre todo en los países más pobres. Afortunadamente o desafortunadamente, entre todas las instituciones del mundo moderno, las universidades son de las más internacionalizadas, en el sentido de que, como vimos anteriormente, derivan de un número limitado de modelos que se encuentran en Europa a partir de las universidades católicas medievales que después fueron adoptadas en otros países y regiones del mundo.

Esta es una estrategia que condiciona al hombre y la mujer modernos a dedicarse a las líneas de investigación y de la producción del conocimiento desde una perspectiva teleológica. La concentración de las universidades más importantes en Europa y en América del norte es una estrategia bastante fuerte que necesariamente les condiciona a los otros países a acudir a estos centros desde donde seguramente terminan recibiendo la misma formación europea. Eso de la misma manera genera lo que se suele llamar la fuga cerebrar de tal manera que la competencia les obliga a los mejores intelectuales a viajar a Europa o a los Estados Unidos para buscar mejores posibilidades de avanzar en sus estudios.

La segunda estrategia que ha funcionado bastante en contra de la producción intelectual latinoamericana es la exterminación de los espacios de reflexión por grupos étnicos como los indígenas y los afrodescendientes. La pluriculturalidad y la multietnicidad seguirán siendo un gran desafío para los europeos y los norteaméricanos por lo que eso puede generar bajo condiciones económica y políticamente favorables. Por este motivo se sigue mitificando y exagerando la producción del conocimiento de los indígenas y los afroamericanos como procesos llenos de supersticiones y por ende no académica. Parte de los desplazamientos masivos de las minorías étnicas en América latina se deben al empeño político de descentralizar los espacios desde dónde existen posibilidades de generar formas alternativas de pensamiento, de ser y de estar en el mundo. Catherine Walsh nos dice que desde la educación es posible colonizar, silenciar y hasta quitar al otro ganas de aprender.

La educación puede, domesticar y colonizar, lo que implica reproducir y mantener el sistema, la situación actual, imponer los valores, la cultura y el conocimiento de los grupos dominantes, silenciar a la gente y quitar sus ganas de aprender. Esta es conocida como una educación verticalista, ajena a la realidad. El pedagogo brasileño Paulo Freire se refirió a esta forma de educar como “educación bancaria”: una educación pasiva cuyo objetivo es depositar el conocimiento en la cabeza del estudiante…la educación debe tener el propósito de liberar, lo que implica descolonizar, construir y transmitir valores, cultura y conocimientos propios de generación a generación. En este sentido, puede estimular lo crítico, creativo y activo, involucrando a la gente en procesos de diálogo y en la construcción colectiva de conocimientos, para así aprender y conocer lo que tenemos en la comunidad.[2]

Otro elemento en contra de la producción intelectual latinoamericana es la comercialización del conocimiento o más bien de la educación. La educación formal se ha convertido en un producto en el mercado. Por eso, no todos pueden vender sus ideas y políticas epistemológicas si no tienen medios adecuados para llegar al mercado. Eso va muy relacionado con la necesidad creciente del hombre de ser superior y ejercer dominio sobre los demás. Por eso, uno se encuentra obligado a educarse pero desde la intencionalidad de tener una Calificación que le de la posibilidad de conseguirse un trabajo o un mejor puesto en la sociedad. Estos trabajos vuelven nuevamente a alimentar los procesos de los mismos protagonistas cuyo interés ya no es conocimiento sino la ganancia que se puede generar desde el profesionalismo. Por tanto, el monopolio del occidente y del norte pone criterios dando orientaciones sobre lo que se tiene que estudiar, la manera y hasta en algunos casos definen el dónde se tiene que hacer algunos estudios específicos. Para ganarse el pan diario, el latinoamericano se encuentra obligado a estudiar lo ajeno para garantizarse mayor ganancia. De esta forma, toda la producción local pierde sentido. Es un fenómeno muy deshumanizante porque de esta forma se le niega a un grupo humano los mecanismos de auto-expresión incluyendo en su propia condición.

El eurocentrismo como única perspectiva de conocimiento descarta la intelectualidad indígena, afro, y otras racionalidades epistémicas. Al despreciar la producción indígena y afro el resultado último es la invisibilización de estos pueblos y definitivamente la deshumanización que lleva a la “no existencia” de estos pueblos en términos de los sistemas de gobernación. Eso quiere decir, los saberes populares o tradicionales no occidentales no se valorizan para nada y tampoco cuentan a la hora de hablar del desarrollo humano. El gran error desde el inicio fue el de implementar una espitemología moderna desde la cual se busca llegar al mundo desde el conocimiento. En cambio se necesita otro enfoque todo distinto donde se debe buscar llegar al conocimiento desde el mundo. Todo tiene que empezar desde la realidad inmediata de la gente.

En términos generales, es evidente que muy poca referencia se hace de la producción intelectual latinoamericana en el exterior. Se supone que la pobreza económica va mano a mano con la pobreza intelectual. Por eso, es muy difícil que las publicaciones desde América latina encuentren lugar en las grandes obras o que sean citados en Europa o en los estados Unidos como autoridades en el campo intelectual. Hay muchos autores latinoamericanos que han dado muy buenos aportes en relación con las distintas áreas del saber pero que sus obras no han sido valoradas al nivel internacional. En cambio, hay mucho escritos que llegan por todas partes del mundo desde Europa y los Estados Unidos por el simple hecho de que tienen la posibilidad económica para dominar el mercado. La misma situación se presenta en relación con los otros modos de comunicación. La invasión europea y estadounidense en la prensa, en la televisión etc. es impresionante y las consecuencias son enormes. Para salir de esta situación, se necesita mucho esfuerzo y una opción sería desde todos los ámbitos de la vida.

Toda esta problemática nos remite a revisar la relación conocimiento y sociedad como también la práctica educativa de nuestro contexto. Sin despreciar lo positivo que nos ha sido transmitido desde la educación formal, debemos hacernos la siguiente pregunta; ¿qué se está haciendo desde nuestros centros educativos que lleve nuestra gente a la verdadera liberación? Necesitamos reconocernos y reinventarnos a partir de nuestras identificaciones socio-culturales y racionalidades diversas para que desde nuestra realidad tan particular podamos hacer una producción auténtica de conocimiento que responda a las necesidades del hombre y la mujer latinoamericanos.

En el centro del antagonismo entre los distintos saberes y las fuerzas políticas está el capitalismo. Eso influye muchísimo las distintas intenciones por las cuales se promueven las instituciones educativas. Bajo estás condiciones, es muy probable que el pragmatismo (desde la rentabilidad económica) sea el criterio desde el cual uno tiende a escoger las distintas líneas de conocimiento y su consecuente producción. Es en medio de estas tensiones que debemos pensar en las posibilidades de promover una dimensión pedagógica que genere valores, actitudes y normas para garantizar la construcción progresiva e integral de la educación como proyecto de vida. Eso sería un gran paso en cuanto a la potenciación de los saberes locales en relación con las distintas epistemologías y cosmovisiones.

Más aún necesitamos decolonizar los sistemas educativos y unirnos a las fuerzas en contra de la ciencia dominante y el neoliberalismo multicultural. De esta manera podemos comprometernos con un proyecto de re-existencia desde donde podemos inventar nuevas formas de la acción política que se coherente con nuestra realidad. Así mismo se hace necesario la consideración de los grupos étnicos tanto en la construcción del saber como en la participación sociopolítica. Durante mucho tiempo se ha descuidado la educación informal que es la fuente de la producción del conocimiento sobre todo entre los pueblos indígenas y los afrodescendientes. Así pues, es urgente la necesidad de valorar por igual tanto la educación formal como la educación informal. De hecho, lo más importante es enganchar las dos fuentes con métodos bien elaborados para que se pueda recuperar tantos valores que pasan por desconocidos. En muchos casos, tiende a dominar la educación formal y así se corre el peligro de perpetuar las doctrinas pedagógicas occidentales. En el seminario “Educación Superior en América Latina” se decía que, no es la academia la que legitima el saber popular, ni tampoco al contrario. Ambos saberes son atestiguados, legitimados y transformados en la medida en que están o no al servicio de hombres y mujeres que asumen su papel de sujetos.[3]

Como punto de partida, creo que nuestra preocupación en este momento no es si tenemos una ciencia latinoamericana o si tentemos un sistema de educación que se llame latinoamericano, sino si la ciencia que hacemos o los saberes que promovemos responden a los desafíos de nuestra realidad como continente o como región limitada. Independientemente de las fuentes del conocimiento, es urgente la necesidad de realizar un proceso de resignificación de todo el saber o de todo conocimiento en relación con la realidad local. Eso no significa un aislamiento de las otras realidades. Tenemos que entrar en diálogo con los otros pero partiendo de lo propio y reconociendo sobre todo las posibilidades de otros lugares fuera de la academia desde donde es posible construir conocimiento. Eso quiere decir que no podemos seguir pensando que sólo en las instituciones de educación formal se puede producir el conocimiento. Paulo Freire nos dice que la educación y particularmente la pedagogía debe liberarse para dar paso a otras formas de pensar y conocer en el mundo. Desde este punto de vista podemos entrar en diálogo con el otro pero siempre y cuando se reconoce que todos somos capaces de producir el conocimiento.

Finalmente, me parece importantísima la necesidad de recuperar el sujeto en los procesos de la producción del conocimiento. Tenemos que repensar sobre el lugar del sujeto en la práctica educativa. Todo el conocimiento pierde su sentido de ser sino no tiene como fin último la promoción de la dignidad humana. La producción del conocimiento no se agota en los conceptos universales. Estos conceptos tienen que encarnarse en el individuo y generar un cambio positivo que le permita vivir mejor, en armonía consigo mismo, son el otro y con el cosmos. De esta manera, se puede hablar de la producción del conocimiento como un proceso gradual en la realización del individuo. Así pues, dentro de la misma producción del conocimiento se va construyendo y consolidando la identidad del individuo. Las tendencias de las comunidades indígenas y de los afrodescendientes han sido bastante marcadas en este aspecto. Ojala que se les puedan apoyar para que no pierdan este enfoque.



[1] Edizon León y Catherine Walsh., Aprender Haciendo. Cartilla ethnoeducativa. Universidad Andina Simon Bolivar Ecuador. 2007. P. 4.

[2] Edizon León y Catherine Walsh., Aprender Haciendo. Cartilla ethnoeducativa. Universidad Andina Simon Bolivar Ecuador. 2007. P. 24-25.

[3] Catherine Walsh., en el Seminario Educación Superior en América Latina, para la VII promoción de la Maestría en Educación: Desarrollo Humano, realizado en la Universidad de San Buenaventura-Cali. 8-09-2007.